Los paneles de radiación infrarroja Celsius y Fahrenheit tienen muchos beneficios para la salud y el bienestar:

• Silencio absoluto.
• Emisión electromagnética nula.
• Gracias a que la humedad relativa se mantiene constante, además de aumentar el confort, los paneles Celsius y Fahrenheit se utilizan terapéuticamente para prevenir o tratar dolores reumáticos o resfríos.
• Dado que el sistema de calefacción por infrarrojos no genera corrientes de aire y, por tanto, no levanta polvo, las personas con problemas respiratorios y los que padecen de asma se benefician de este tipo de calefacción.
• Incluso los usuarios de lentes de contacto se beneficiarán de un entorno más limpio con una humedad constante.
• El efecto de los rayos infrarrojos en esta longitud de onda, activa la recuperación muscular antes del deporte y ayuda a prevenir desgarros musculares.

Cada panel Celsius está equipado con una unidad de control independiente y programable, fácil e intuitiva de usar, que le permite programar tiempos y temperaturas de manera ideal según sus necesidades y las características del entorno.

Cuando la habitación calentada por los paneles infrarrojos ha alcanzado el confort térmico, el sistema de regulación de la temperatura debe intervenir para limitar la producción de infrarrojos y el consumo de corriente. Muchos fabricantes descuidan la regulación, dejando grandes grupos de materiales eléctricos a interruptores con cronotermostato. De esta manera, sin embargo, solo se obtiene una regulación ON-OFF que tiende a sobredimensionar la solicitud de suministro de energía eléctrica.

Por esta razón, los productos Celsius y Fahrenheit están equipados con electrónica dedicada y personalizada montada a bordo que detecta la temperatura a través de un termopar y reduce el consumo de electricidad a medida que se alcanza la temperatura establecida. Entonces, un panel con un pico de 550W consume 80W-250W a plena capacidad en función del aislamiento de la casa y la demanda de calor. Esto conduce al uso de un sistema con una potencia disponible menor que la potencia pico.

El grado de protección se indica con un índice denominado IP y está compuesto por dos dígitos, el primero se refiere a la protección contra la entrada de objetos sólidos, el segundo a la protección contra la entrada de líquidos.

Gracias a un innovador material aislante pudimos integrar todos los contactos eléctricos, protegiéndolos de cualquier agente externo: los paneles Celsius y Fahrenheit tienen un grado de protección IP68 que los hace completamente herméticos al polvo y humos y aptos para sumergirlos en agua hasta 100m , la unidad de control tiene una protección de IP 54.

Otros paneles de infrarrojos, aunque estéticamente muy similares, tienen un grado de protección mucho menor, lo que los hace inadecuados para ambientes muy húmedos (como duchas o baños).

La superficie del panel de vidrio se puede tocar sin riesgo de quemaduras. El cristal, a diferencia del metal, permite una radiación de hasta más de 12 metros desde la fuente con la línea Celsius.

Los paneles Celsius y Fahrenheit son fáciles de transportar y ensamblar incluso sin la necesidad de mano de obra especializada.

Para un mejor rendimiento de los paneles es aconsejable colgarlos a una altura de entre 5 y 15 cm del suelo, en la parte central de la pared más fría.

Deducción fiscal del 65% para sistemas de automatización de edificios.

Deducción fiscal al 50% para renovaciones que impliquen ahorro energético.

Precios especiales para:

• Aquellos que construyen la casa completa con paneles Celsius o Fahrenheit;
• Comunidades de recuperación y organizaciones benéficas;
• Discapacitados;
• Hospitales.